Una vez cuando hablaba con Alain me dijo que el silencio era horrible, que no debería de existir. Yo le dije que sin silencio no hay música, que en momentos difíciles es mejor que solo sientan tu presencia aunque no hables, que debemos de aprender a leer a la gente. En silencio.
Entonces le puse un ejemplo muy simple: Tumbarte sobre la hierba un día con tu novia y ver figuras en las nubes, los dos en silencio. El dijo que prefería estar diciendo “mira aquí hay un león, ah y ese es un conejo” Comprendí y le regale un silencio.Cada quien sus monstruos.
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